QUE MUNICIPIO DEBEMOS PENSAR HACIA EL FUTURO?
Por el Cr. Gustavo Peretti
01-09-2024 – Se acerca Octubre, momento en que el D.E.M. debe presentar el presupuesto, y es también el momento de ponerse a pensar qué habría que hacer para orientar la estructura municipal a los cambios que se vienen dando en el país.
La Municipalidad de Hernando, lleva adelante desde hace años, programas de gobiernos basados en la teoría, ya perimida, del «estado presente», en donde el municipio pareciera el encargado de llevar adelante todo aquello que no es rentable o que otras instituciones no pueden realizar.
Así se ha dado un estado municipal que se ha ido expandiendo de una manera exponencial y poco planificada, con una permanente construcción de nuevos edificios, oficinas y demás, lo cual supone cada vez mayor cantidad de recursos económicos y humanos para poder operarlos y mantenerlos, así por ejemplo podemos nombrar en los últimos años, la casa del deportista, el centro cultural Raúl Alfonsín, el edificio inteligente, nuevas oficinas para el tribunal de faltas, un truncado nuevo polideportivo que no llegó a ser porque la oposición marcó la situación, la creación de nuevas secretarías y direcciones y hasta se estatizó un evento que no le correspondía al municipio, porque esa no es función del estado.
Todo esto sale plata, mucha plata…, y la pregunta que subyace a los lectores es la siguiente, de donde creen que salen los recursos para sostener tamaño aumento del estado municipal; seguro que contestaron correctamente, de las tasas y contribuciones presentes y futuras que se cobran en la ciudad.
Por eso es que en estas épocas que vienen, con políticas de desregulación y desburocratización del estado, y de cara a la elaboración, presentación y tratamiento del presupuesto, así como también planteando un Hernando hacia los próximos años, debe pensarse como logramos tener un estado municipal más chico, más eficiente y que le cueste menos dinero a los hernandenses.
El ante año hubo un debate muy fuerte en la reducción de la tasa que se cobra a los automotores, que no llegó a un resultado totalmente satisfactorio, sin embargo pone en relieve como podemos hacer para poder cobrar una tasa con la misma valuación e importe que cobra la provincia; cómo hacemos para sacar todos los derechos de oficina que se cobran por una gran cantidad de trámites de índole burocrática que se realizan en la municipalidad y que deben ser replanteados, si hablamos de querer tener un país más competitivo con el resto del mundo; entendiendo que la competitividad debe pensarse por una menor traslación del costo del estado hacia el sector privado, mejorando el tipo de cambio real, por un mayor ingreso disponible del contribuyente que le permita, ahorrar más, invertir más y consumir más; y no por una variación nominal del tipo de cambio (devaluación) que termina en una traslación a precios, que no es otra cosa que el comienzo o el impulso de un proceso inflacionario, que es el impuesto más caro que puede pagar una sociedad.
La Argentina gira en torno a un modelo liberal y capitalista, por ello, es hora de comenzar a aggiornar el estado municipal, de achicarlo, de desburocratizarlo, de eficientizarlo, de bajarle los impuestos a la gente; para de esa forma contribuir a tener una Argentina mejor, por un futuro mejor para nosotros y para nuestros hijos.
